Gruñón y las dos Blancanieves.

Había una vez un perrito muy bonito que se llamaba Brook que nació en Ferrol,con unos papás muy ,muy buenos.El papá era americano(Kramer) y la mamá era galleguiña(Waki).Tuvo seis hermanitos y una hermanita,que pronto se fueron de su casa para otros lugares,algunos de ellos tan lejanos como Tenerife y Argentina.

Brook se quedó en Galicia,con sus papás Diego y Cristina,y con su tío golfo,Nacho que le sacaba a de juerga y a  hacer torneos de exhibición por distintos sitios de España.
Brook creció y era el orgullo de su tío Nacho y de todos sus Ancestros.Era un buen chico,y allá donde iba era aplaudido y subía a los podium para que la gente le hiciese fotos,después de ganar sus categorías infantiles.Desde esos podium veía luego llegar a los hermanos mayores,los perros de clase abierta,y pensaba que nunca sería lo suficientemente grande para competir con ellos y ganarles.
Pero Brook creció,y pronto fue un príncipe guapo y atractivo,a cuyos pies caían juezas de todo el  Mundo como Orietta Zilli,Irene González o Dorothea Hanlon.
Y pronto llegó el día en que nuestro príncipe de Cuento fue a participar en su primer torneo de Mayores,en Valladolid,la antigua Capital del Imperio.Había allí contendientes de tierras tan lejanas como Estados Unidos,Inglaterra,Suecia o incluso tierras tan  distantes como Lalín(que queda llegando por Transilvania a mano izquierda,detrás de la casa de Drácula).

Comenzó la Justa,y Brook empezó  a batir uno a otro a todos sus rivales,y al final se quedo en la Justa final...¿Y adivinais quien era su últimorival??'Su propio padre,Kramer,y hasta  a él le ganó.Brook se convirtió entonces en el Rey de Valladolid,y dos bellas damiselas competían por sus favores,Así que decidió casarse con las dos.
Aquí teneis la foto de Brook con sus dos bellas damiselas s,las dos Blancanieves,su padrino,el tío Nachete que iba hecho un pincel y el cura que los casó,que por ser una Boda Civil iba de traje y vino desde Zamora la Real para tan magno Acontecimiento.Ah...y ese alto es el que pagó el convite...